viernes, 31 de diciembre de 2010

La mayor San Silvestre del mundo

Delante de la salida

34.000 personas corrieron en la San Silvestre popular Vallecana, la última gran carrera que sirvió para despedir el año, precedente a la Internacional. Las calles de Madrid se vieron inundadas por la marea azul, con 27172 atletas con chip llegados a meta.

Cuando desde la Junta Directiva del A.C. Manchathon se propuso participar, no sabíamos como iba a responder los miembros del club, pero su respuesta fue positiva, con una participación al final de treinta. Nos montamos en autobús y todos a conquistar la capital.

Llegada con tiempo de suficiente para poder dejar, el autobus en la salida y servirnos de guardarropa, inspeccionar la entrada a los cajones y calentar. Pese a que nos gusta apurar hasta el último momento, aproximadamente con quince minutos ya empezamos a buscar nuestro sitio en la salida, se hace eterna tanta espera, el calor de la gente se empieza a sentir.

Las 17:30 salida de la primera tanda, la más rápida, salida picada en subida hasta coger la calle Serrano, veo pasar gente por todos los lados, y solo pienso en no caer y mover las piernas, ya llegara el momento en que pasados los primeros kilómetros pueda ir al ritmo que me marque el cuerpo. Pese a llevar las piernas cansadas, el terreno favorable, el recordatorio de las calles según pasamos, las recuerdo de otras carreras, la señalización cada 500 metros, hace que la carrera sea muy cómoda. Llegamos al cinco, el parcial me indica que puedo bajar de cuarenta (dos semanas antes no pude en Aranjuez). Las sensaciones son buenas, mejor que las que marca el reloj, del ocho al nueve el mil más largo, subida donde aprovecho para ganar posiciones. Llega el final comenzamos cuesta abajo, hasta los doscientos metros finales, que pese a ser en subida no lo notamos. Vuelvo la esquina y veo un registro por debajo de 40, con treinta y nueve cincuenta y seis.

Una vez pasada la línea de meta, un nuevo reto ¿dónde está el autobús?, sigo toda la linea de guardarropas, los puntos de encuentro, y continuo hasta llegar al Teresa Rivero, después de preguntar, me van dirigiendo hasta llegar a la avenida donde estaba el bus, ¡20 minutos! un poco mas y tardo más que en la carrera. Desde allí y con la ayuda del móvil, dirigimos a los compañeros hasta de nuevo estar todos juntos para la vuelta.


Manchathon, con sus colores

1ª Salida

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